Pocas explicaciones sobre lo que sucede en Ayotzinapa me satisficieron más que la última entrada de La Biblia de los pobres. Ni las figuras estudiadas por José Emilio Burucúa ni ningún otro texto ofrecen un fresco tan intenso, arqueológico –como prefiere Agamben–, de la realidad mexicana. Y lo hace, como cabe, a través del análisis de obras del arte y la cultura aztecas contrastadas con sus caricaturas en la actualidad. Brillante.
Comienza así: "Una frase atribuída a Profirio Díaz, el hombre fuerte de México que
definió toda una época – el Porfiriato, 1876-1911 – ha quedado impuesta
como el estigma mexicano: “Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca
de los Estados Unidos”. Lo cierto es que la frase pertenece, al parecer,
a Nemesio Garcia Naranjo, director del diario La Tribuna e intelectual
mexicano. Pero el hecho que se le atribuya a esa condensación de la
historia latinoamericana – pendulando siempre entre la tiranía y la
revolución – que es Porfirio Díaz le otorga varias capas de sentido que
aún resuenan cuando se menciona la frase. Y cuando se la piensa." Sigue acá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios se moderan, pero serán siempre publicados mientras incluyan una firma real.