socio

"I don't want to belong to any club that will accept people like me as a member." Groucho Marx en Groucho and Me (1959).

sábado, 29 de octubre de 2016

feria de identidades

El encuentro de Colectividades de este año contará con una muestra en el stand argentino en la que Marcos López y una veintena de artistas convocados desde la secretaría de Cultura exhibirán un registro de las nuevas identidades generadas por la migración reciente en la ciudad. Hablamos con el artista sobre la propuesta.
Todas las fotos son de Marcos López.

“Ahora me sumerjo en Rosario como si fuera Kuala Lumpur. Trato de empezar de cero”, escribe Marcos López, fotógrafo, artista de la mezcla y el cruce, creador de una serie de “estampitas” que ilustran una argentinidad de frontera, cambiante, negra, mestiza, gringa, colorinche, devota y bastarda y profana.
El 32º Encuentro y Fiesta Nacional de Colectividades, que se desarrollará en el Parque Nacional a la Bandera entre el 4 y el 10 de noviembre, será el marco en el que López se propone transgredir de algún modo lo que podría ser la idea subyacente del encuentro: la de un origen certero, inmaculado, de cada colectividad.   
A partir de una propuesta de la subsecretaria de Industrias Culturales y Creativas de la Municipalidad de Rosario, el stand argentino de Colectividades contará con una intervención artística de Marcos López guiada por la consigna de repensar y observar los procesos de las nuevas identidades que se generan en el territorio local a partir de la mixtura que generan las migraciones. Para ello fueron convocados fotógrafos de la ciudad, profesionales y amateurs, que hicieran imágenes con una cámara o un teléfono. López, junto con otros dos artistas seleccionaron a Estefanía Miguel, Juan González del Cerro, Lorena Andrea Valdez,  Ana Isla, Ornella Avedikian, Marianela Castagna, Juan Cruz Cosio, Germán Ruhl, Virginia Chouhy y Juan Failla, quienes inaugurarán la muestra este miércoles.

martes, 25 de octubre de 2016

"mi formación jesuita me salvó de ser gorila"


“No sé en qué me estoy transformando”, bromea Luis Contigiani (@luiscontigiani). Se refiere al protagonismo que adquirió en la política provincial desde que juró como ministro de la Producción del gobierno de Miguel Lifschitz y a las especulaciones que muchos hacen sobre una posible candidatura suya. De perfil bajo en la secretaría de Agricultura durante la gestión pasada, este nuevo cargo lo tiene con una alta visibilidad y como el funcionario que más expone su oposición a las políticas del macrismo. En diálogo con este periodista de Cruz del Sur, este hombre de Arequito que no está afiliado a ningún partido político contó cómo influyeron los jesuitas en su formación política y se mostró decidido a no juzgar “el barro de la política” desde un lugar expectante.
—¿Qué tanto margen de maniobra tiene una provincia para poner a los distintos sectores productivos al resguardo de las políticas macro económicas que impone el gobierno nacional?
—Hoy las provincias tienen un margen acotado para definir o condicionar la macroeconomía, algo que es fundamental para el desarrollo. Podemos tener políticas contracíclicas, que es lo que estamos haciendo. Pero eso no es definir la política o el poder, lo que estamos haciendo es comprar tiempo. Las provincias tienen que recuperar márgenes de federalismo fiscal. ¿Quién grava la renta financiera? El mayor rendimiento económico de este año fue la operación de títulos de Lebacs al 38 por ciento combinados con dólar Rofex Futuro. Esa operación daba 12 a 13 por ciento de ganancia de renta financiera. Esos son grandes capitales internos y externos haciendo una fenomenal ganancia millonaria. Y eso no derrama nada. Mientras tanto, se le pide al pueblo sacrificio con las tarifas. ¿Quién grava esa renta? Porque mientras tanto se sigue gravando a los alimentos con el IVA y a las pymes con Ingresos Brutos.
Imagen tomada de Noticias de Santa Fe.

—En los últimos años cobró fuerza, con la puesta en marcha de una economía de corte keynesiano, el concepto de “economía real”. ¿Considera que ese debe ser el norte de todas las políticas que se diseñen?
—Creo que el keynesianismo es importante porque está basado en el rol del Estado, en reinstalar al Estado como generador de la obra pública y dinamizador de la economía; en la necesaria conducción política del capital. En estos años se reestatizaron empresas, se avanzó en regulaciones y se revalorizó la autoridad política. Pero aún así, no logramos implementar otra política de desarrollo industrial que sea de fondo, que cambie la matriz. Porque, más allá de los intentos por hacerlo, no se logró transformar productivamente al país. Es decir, desde 1976 con Martínez de Hoz, a la fecha, la foto productiva argentina más o menos es la misma: complejo oleaginoso, petroquímico, agroexportador, autopartes, poco valor agregado, primarización de la producción. En definitiva, sobran 15 millones de personas.

lunes, 24 de octubre de 2016

el socialismo desaparecido del siglo xix (entrevista a horacio tarcus)

Horacio Tarcus (Buenos Aires, 1955) es historiador, doctorado por la Universidad Nacional de La Plata. En 1998 fue uno de los fundadores del Cedinci (Centro de Documentación e Investigación de la Cultura de Izquierdas en Argentina, que hoy depende de la Universidad Nacional de San Martín), que creó en base a un archivo propio de libros, revistas, publicaciones políticas, enterrado durante la última dictadura en una quinta del Gran Buenos Aires cuando la mera posesión de ese tipo de materiales era de una peligrosidad temeraria.
Fue director del “Diccionario biográfico de la izquierda argentina. De los anarquistas a la “nueva izquierda. 1870-1976” (2007, que escribió, como bromeaba entonces, para que las agrupaciones universitarias pudieran variar los nombres de sus agrupaciones, por lo general acotados a Agustín Tosco o Santiago Pampillón) y compilador de “Cartas de una hermandad. Leopoldo Lugones, Horacio Quiroga, Ezequiel Martínez Estrada, Luis Franco, Samuel Glusberg” (2009). Entre sus libros, se cuentan: “El marxismo olvidado en la Argentina: Silvio Frondizi y Milcíades Peña” (1996), “Mariátegui en la Argentina o las políticas culturales de Samuel Glusberg” (2002) y “Marx en la Argentina. Sus primeros lectores obreros, intelectuales y científicos” (2007).
Fotografía de Diego Spivacow, tomada de La Nación.
El viernes último presentó en Rosario “El socialismo romántico en el Río de la Plata. 1837-1852” (2016): “El libro está animado –nos escribe– por una búsqueda en el pasado de otras izquierdas, de otras potencialidades que luego se truncaron y que iban en el camino de una izquierda no tan sindicalista, no limitada al techo de la reivindicación sindical, y que se conectaba con todo un programa vital de pedagogía moderna, creación de bibliotecas populares, emancipación de la mujer, fundación de mutuales y cooperativas, arte orientado al pueblo, políticas de higienismo, de eugenesia. No es una tradición liberal, al contrario, es antiliberal. Y manifiesta una voluntad popular, que no tiene que ver con el peronismo. Ciertamente, es un mundo desaparecido, pero al ignorarlo u olvidarlo lo desapareceríamos dos veces”.

martes, 18 de octubre de 2016

los premios

Una semana se demoró el anuncio del Premio Nobel de Literatura 2016- Las sospechas se diluyeron el jueves pasado, cuando se anunció que el ganador era nada menos que Bob Dylan, cuyo nombre rondaba las ternas para el máximo galardón desde hace un par de décadas. Al día de hoy, el mismo Dylan no se expidió aún y, como muchos sospechan, tomará el Nobel como otros premios importantes que recibió a lo largo de sus 54 años de carrera (Robert Allen Zimmerman, según su nombre de nacimiento, nació el 24 de mayo de 1941).
Los argumentos de la academia para otorgarle el premio a Dylan parecen posicionaran al comité sueco entre lo más avanzado de la crítica, que no necesita ni una novelística o una lírica palpable para reconocer la literatura. En el anuncio oficial, la vocera de la Svenska Akademien destacó que el jurado había valorado al músico, de 75 años y toda una leyenda del rock, por “haber creado nuevas expresiones poéticas dentro de la gran tradición de la canción estadounidense”.

Sara Danius, secretaria permanente de la Academia –quien eligió a Dylan, incluso aconsejó que para “empezar a escuchar o leer (a Dylan), se debería comenzar con ‘Blonde on Blonde’, el disco de 1966 que tiene varios clásicos y es un ejemplo extraordinario de su brillante modelo de rima, de su armado de estribillos y de su pensamiento pictórico”.
En diciembre de 1997, cuando Dylan recibió el premio Dorothy and Lilian Gish en Nueva York, el gran crítico y cronista del rock Grail Marcus –quien siguió su carrera desde los días en que se presentaba en los recitales de Joan Báez–, fue mucho más eficaz en la descripción: “Bob Dylan trabaja en varios campos: como cantautor, como cantante, como el tipo al frente de una banda, como guitarrista –un hombre que canta y baila, como él mismo lo dijo. Trabaja como historiador, como si se nutriera de libros perdidos; trabaja como moralista; funciona como una especie de detective privado, un sabueso que toma los casos que la mayoría de nosotros ni siquiera reconocemos como misterios. Antes y después de todo eso, sin embargo, Bob Dylan es un performer: alguien que aparece en público, ante otras personas, toma lo que puede de ellos, devuelve lo que tiene que dar, dice lo que tiene que decir, recoge los frutos y se hace cargo de las consecuencias”.
La revista Vulture hizo un recuento, el mismo día que se conoció el Nobel, de cómo recibió Dylan los distintos premios a durante su carrera. Aquí resumimos los más diez importantes:

viernes, 14 de octubre de 2016

encuentro con el oráculo (bob dylan en rosario)

Bob Dylan ganó el Nobel de Literatura. Entre las cosas que leo me encuentro con esos interrogantes en torno al Nobel mismo: ¿se premia una tradición, un canon o una forma de circulación de lo literario?
Siempre se me hizo que el Nobel es un premio más, incluso uno que no tuvieron muchos de mis escritores preferidos. Pero no es el caso de Dylan: leo allí la sordera de las escuchas futuras y el placer de hallarme en una corriente que es, si se quiere, ecuménica, como alguna vez fue la literatura.
Lo que sigue es la crónica del recital que Dylan dio en Rosario el 18 de marzo de 2008, según lo que escribí para la revista Transatlántico.   

“El gato está en el pozo y el lobo mira hacia abajo. Su cola espesa y enorme barre todo el piso. El gato está en el pozo, la dulce dama está dormida. No escucha nada, el silencio se le pega al abismo”.

miércoles, 12 de octubre de 2016

black mirror: la tierra media

Ya lo había dicho el escritor británico J.G. Ballard (Crash, Noches de cocaína) en un artículo de fines de los 70: “En el futuro, el planeta más extraño será la Tierra”. Como nunca pudo sacarse el mote de escritor de ciencia ficción, Ballard no sólo definía uno de los caminos de esa rama de la literatura (la épica de la conquista del espacio había culminado), también definía su propia obra: el futuro, pero 15 minutos después a partir de ahora; el futuro que arrastra todas las proezas, frustraciones y monstruosidades del presente.
Es oportuno mencionar a Ballard para hablar de la serie Black Mirror, cuya tercera temporada (seis episodios individuales, de antología, como se dice en inglés) se estrena entera en Netflix el próximo viernes 21 de octubre.

Géneros
En una entrevista publicada en IndieWire, Charlie Brooker, creador de la serie que arrancó en el canal británico Channel 4, y su productora Annabel Jones, dicen que habrá un amplio abanico de géneros en esta tercera temporada (las dos anteriores sumaban seis episodios en total, a la que hay que sumarle un especial navideño: todas disponibles en la actualidad en la plataforma on demmand). Desde un drama íntimo a un episodio de guerra moderna, otro sobre videojuegos de terror y hasta uno de procedimientos policiales.

martes, 11 de octubre de 2016

la locura neoliberal

La salud mental, que en Argentina tiene una ley nacional –ahora limitada por un decreto que habilita otra vez las internaciones y el paradigma médico tradicional– abarca tanto el tratamiento de la enfermedad como de las adicciones. El tema, complejo, siempre invisiblizado, es expuesto en toda su relevancia a través de este manifiesto que tradujimos de la revista neoyorkina Ozy.com, donde se prevé que para 2030 las enfermedades mentales crecerán al nivel de una epidemia como la del sida en los 80. El suicidio, síntoma de este tipo de padecimiento, es la causa principal de muertes, a nivel global, de chicas adolescentes.


La memoria de la epidemia de VIH Sida permanece vívida para quienes atravesaron los 80. Estaba en todos lados y en ninguna parte a la vez: se erigía como una asesina y, simultáneamente, era barrida bajo la alfombra por las autoridades estadounidenses. Las personas con HIV Sida dieron pelea sin acceso a cuidados médicos apropiados y quedaron en una posición estigmatizada y vulnerable a la discriminación.
Hoy en día la enfermedad mental se ubica en un espacio similar. Uno de cada cuatro personas la sufren de algún modo, muchos al enfrentar violaciones a los derechos humanos, la escasez de servicios y el estigma. Sobre todo, la enfermedad a menudo resulta mortal: en la actualidad el suicidio es la causa fundamental, a nivel global, de la muerte de chicas cuyas edades van de los 15 a los 19 años. Tanto como el HIV Sida se expandió a millones de nuevos casos durante más de una década, se espera que las enfermedades mentales aumenten de manera considerable hacia 2030. El problema es que la enfermedad no está siendo focalizada como una crisis global. Del mismo modo que lo vimos con el VIH Sida, las acciones efectivas podrían ahora mismo salvar a millones, pero eso no puede provenir de un grupo aislado. Ya que en estos días se celebra el Día Mundial de la Salud Mental, vamos a tomar este momento para comenzar a trabajar juntos y poner un mojón próximo a 2016 como punto de inflexión fundamental para la salud mental.
Fotografías de Isis Milanese pertenecientes a su muestra La vida después, para la que la fotógrafa visitó durante dos años las casas que habitan pacientes de la Colonia Psiquiátrica de Oliveros y son parte de un dispositivo de desmanicomialización promovido a partir de la nueva ley de Salud Mental.